Hombre y mujer seguros e informados sobre la masturbación tras conocer datos científicos.

Mitos y verdades sobre la masturbación que debes conocer

Escrito por: Andrés Suro

|

|

Tiempo de lectura 4 min

La gran mayoría de personas se masturba, sobre todo los hombres. Pero eso no quita que la masturbación ha sido durante siglos un tema rodeado de tabúes, prejuicios y desinformación. De hecho, muchos de ellos los seguimos arrastrando. Sin embargo, gracias a los avances del conocimiento sobre sexualidad y el acceso a la educación sexual, hoy podemos hablar con mayor libertad sobre esta práctica, desmitificando todas las creencias erróneas que siguen existiendo y reafirmando sus verdaderos beneficios.


Por ello, en este artículo, nos hemos propuesto abordar los principales mitos sobre la masturbación de la mano de la ciencia para que siempre tengas los argumentos necesarios para convencerte a ti y a tus amigos de que la masturbación es de las prácticas más sanas que puedes practicar y que no tienes porqué avergonzarte de ello.


¿La masturbación es perjudicial para la salud?


Uno de los mitos más extendidos afirma que masturbarse es malo para la salud. Nada más lejos de la realidad. Diversas investigaciones han demostrado que la masturbación es una actividad completamente natural que forma parte del desarrollo sexual saludable. De hecho, puede llegar a reducir el estrés, mejorar el estado de ánimo y favorecer el conocimiento del propio cuerpo (Laumann et al., 1994).


Al contrario de lo que se cree, no existe evidencia científica que relacione la masturbación con enfermedades físicas o mentales. Más bien, si se practica con moderación y sin interferir en la vida diaria o en las relaciones sociales, puede favorecer tu bienestar.

¿Masturbarse con frecuencia disminuye el deseo sexual?


Muchas personas creen que masturbarse mucho termina agotando el deseo sexual o reduce el interés por el sexo en la pareja. Sin embargo, los resultados de múltiples estudios muestran lo contrario. La masturbación no solo no disminuye el deseo sexual, sino que ayuda a mantenerlo activo, especialmente en personas que están pasando por periodos de abstinencia o estrés.


Además, es una herramienta útil para aprender a controlar la excitación y mejorar la respuesta sexual, tanto individual como en pareja. Lo importante es la actitud con la que se practica y no la cantidad, ya que el deseo sexual no se “gasta”, sino que responde a estímulos físicos, psicológicos y emocionales.


¿Los hombres se masturban más que las mujeres?


Otro de los mitos que más siguen persistiendo es que la masturbación es una práctica mayoritariamente masculina. Es cierto que los estudios señalan que los hombres tienden a masturbarse con mayor frecuencia, pero esto no significa que las mujeres no lo hagan. En realidad, cada vez más mujeres reconocen esta práctica como parte de su bienestar sexual.


Para ello, tenemos que entender que la masturbación en el caso de las mujeres sigue estando más estigmatizada por factores culturales y educativos. Sin embargo, es igualmente beneficiosa y necesaria para el autoconocimiento sexual, la aceptación del propio cuerpo y la mejora de la respuesta sexual en las relaciones con otras personas. De hecho, una forma muy positiva de enriquecer la sexualidad en pareja es, precisamente, con las masturbaciones.


¿La masturbación es adictiva?


No, pero tenemos que matizar. Aunque la masturbación en sí no es adictiva, sí que es cierto que, como cualquier conducta placentera puede llegar a convertirse en un comportamiento compulsivo si se utiliza como mecanismo para evadir ciertas emociones desagradables, problemas o malestar en general. Por eso es muy importante distinguir entre un hábito frecuente y que te proporciona un placer o una conducta que te genera malestar, culpa o interfiere con la vida cotidiana.


¿Cómo podemos saberlo? Cuando se presenta de manera compulsiva, puede ser un síntoma de otro problema subyacente, como ansiedad o baja autoestima. En esos casos, es recomendable consultar con un profesional para explorar las causas y encontrar formas más saludables de canalizar las emociones.

¿La masturbación daña el rendimiento sexual en pareja?


En relación con el mito de que masturbarse con frecuencia puede disminuir el deseo, también se cree que afecta al rendimiento sexual en pareja. Pero lo que ocurre es justo lo contrario, ya que la masturbación no perjudica la intimidad en pareja, sino que la complementa. El hecho de conocerse mejor a uno mismo permite tener más claros tus gustos, límites y preferencias. En muchos casos, la masturbación compartida es una forma de intimidad y juego sexual dentro de la relación que ayuda mucho a encontrar la tensión y excitación.


Además, no todas las personas tienen el mismo ritmo de deseo sexual, y masturbarse puede ser una forma de satisfacer esa diferencia sin generar presión en la pareja. El verdadero enemigo no es la masturbación, sino la falta de diálogo y comprensión dentro de la relación.


Conclusión: normaliza la masturbación


La masturbación es una conducta sexual más que normal, saludable y beneficiosa cuando se vive sin culpa ni miedo. Pero es necesario que rompamos con los mitos que la rodean para tener una relación más libre, consciente y placentera con nuestra sexualidad. Por eso te invitamos a verla como una herramienta más de bienestar, autoconocimiento y conexión con uno mismo.


Hablar de masturbación sin prejuicios es también una forma de educar, prevenir y fomentar una sexualidad más libre, diversa y empática.


Referencias

  • Laumann, E. O., Gagnon, J. H., Michael, R. T., & Michaels, S. (1994). The Social Organization of Sexuality: Sexual Practices in the United States. University of Chicago Press.

  • Dekker, A., Schmidt, G., & Drosdowski, B. (2005). Self-pleasuring in the context of sexual health: A study among Dutch adults. Archives of Sexual Behavior, 34(3), 261–272.

  • Derbyshire, K. L., & Grant, J. E. (2015). Compulsive sexual behavior: a review of the literature. Journal of behavioral addictions4(2), 37–43.  https://doi.org/10.1556/2006.4.2015.003  

  • Brotto, L.A., & Heiman, J.R. (2007). Mindfulness in sex therapy: Applications for women with sexual difficulties following gynecologic cancer. Sexual and Relationship Therapy, 22, 11 - 3. 

Andrés Suro

Autor: Andrés Suro  (Sexual Coach en MYHIXEL)


Psicólogo especializado en el área social y experto en sexología aplicada a la educación.

Leer más sobre el autor