
¿Es posible aprender a durar más en la cama? La ciencia dice que sí…
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Tiempo de lectura 6 min
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Cómo psicólogo y sexólogo con años de experiencia en la salud íntima masculina, la pregunta que más me han hecho es: ¿se puede aprender a durar más en la cama? La respuesta es un rotundo sí. Y está respaldada por la ciencia. Así que, si alguna vez te has preocupado por la duración de tu rendimiento sexual, no estás solo (ni perdido). Muchos hombres atraviesan por este dilema, pero lo cierto es que hay múltiples factores que influyen en la duración del encuentro sexual y, afortunadamente, muchos de ellos se pueden modificar.
Al contrario de lo que muchos creen, la duración del sexo no solo depende de la biología, sino también de aspectos psicológicos, emocionales y de comportamiento. La clave está en comprender cómo funciona nuestro cuerpo y nuestra mente en estos momentos, para poder implementar estrategias que nos ayuden a controlar mejor la excitación y prolongar el placer tanto para ti como para tu pareja. Y como experto en el tema, te voy a compartir a continuación los métodos y estrategias clínicamente probadas que pueden ayudarte a mejorar este aspecto de tu vida sexual.
Como te podrás imaginar, cuanto más en forma estés, mejor te va a ir en el sexo. Pero resulta que no solo por una cuestión de resistencia: la circulación sanguínea, los niveles de testosterona y el bienestar general que nos produce el deporte también influyen en nuestra capacidad para mantener erecciones y prolongar el acto sexual. Es por eso que siempre recomendamos mantener un estilo de vida saludable. Esto quiere decir, que incluya ejercicio frecuente y una dieta equilibrada. De esta forma, no solo mejorará tu salud en general, sino que también vas a notar como aumenta tu rendimiento sexual.
Según un estudio realizado por la Universidad de Harvard (2016), practicar ejercicio físico frecuentemente no solo ayuda a mantener la salud del corazón, sino que también mejora la circulación sanguínea, lo que a su vez favorece la firmeza de las erecciones y la duración de los encuentros sexuales. Además, la práctica de ciertos ejercicios específicos, como los Kegel, fortalece los músculos del suelo pélvico, lo que puede ayudar a prolongar el tiempo antes de la eyaculación. Sin embargo, debido a la dificultad para dominar los Kegel, no suele recomendarse hacerse en casa sin supervisión.
Otro de los factores determinantes en la duración del acto sexual es la salud mental y emocional. Para muchos hombres, los grandes enemigos en la cama son el estrés y la ansiedad, que afectan el rendimiento sexual. Y es que algunos confiesan sentir una presión por durar más que les genera un ciclo de ansiedad. La ansiedad actúa como un desestabilizador que, irónicamente, suele llevar a una menor duración porque afecta al control de la eyaculación. De hecho, esta ansiedad, conocida como ansiedad sexual, es la precursora de muchos casos de eyaculación precoz, que se asocia a factores psicológicos como la tensión o el miedo al rendimiento.
Un estudio realizado por la Universidad de Barcelona (2019) demostró que la ansiedad y las constantes preocupaciones sobre el sexo interfieren en el control de la excitación, que también afecta la duración. Por lo tanto, una de las claves para mejorar el control y aprender a durar más implica gestionar estas emociones. Para ello, puedes llevar a cabo técnicas de relajación, como la meditación o la respiración profunda, pero tenemos técnicas y estrategias específicas para ti.
Existen varias técnicas que se han demostrado efectivas para ayudar a prolongar la duración del acto sexual. La técnica “star-stop” es una de las más conocidas y consiste en detenerte por un breve momento cuando sientes que vas a eyacular. Al hacer una pausa, la excitación disminuye por lo que se vuelve a recuperar la sensación de control y, cuando se retoma la actividad, el hombre ya no siente que vaya a terminar inminentemente. Este método puede ser practicado tanto durante el sexo como en la masturbación para aprender a identificar y controlar los momentos de alta excitación.
Otra estrategia es la técnica del “apretón”, que consiste en presionar ligeramente la base del pene con los dedos en el momento justo antes de la eyaculación, lo cual ayuda a retrasar el clímax al reducir la sensación de excitación. El problema de estas dos técnicas es que no son técnicas que estén probadas para ser definitivas, sino que es necesario llevarlas a cabo cada vez que se quiera obtener el efecto deseado.
Sé que suele ser una de las tareas pendientes de muchos hombres, pero quiero que te grabes algo a fuego en la mente: la comunicación con tu pareja también influye en que dures más en la cama. Sí, lo que lees. Hablar sobre tus preocupaciones y tus deseos suele contribuir a disminuir la presión y fomentar un ambiente de confianza, en el que se siente mayor apoyo y comprensión. Según unos estudios realizados en la Universidad de Yale (2020), las parejas que mantienen una comunicación clara y profunda sobre sus necesidades sexuales experimentan una mayor satisfacción sexual y menor ansiedad en relación al rendimiento.
Si bien muchas de las estrategias mencionadas pueden resultar útiles, no todos los hombres consiguen los resultados satisfactorios que buscan a través de estos métodos que puedes hacer en casa. En estos casos, siempre tienes la opción de decantarte por métodos clínicamente probados, como el producto para el control del clímax MYHIXEL Control. Se trata de un programa para el control eyaculatorio que incluye un dispositivo de entrenamiento. Está clínicamente probado que entrenar de manera realista da mejores resultados, y por esa razón podrás llevarlo a la práctica y mejorar el control durante el acto.
Si ya estás en tratamiento con un terapeuta sexual o un psicólogo, los dispositivos de MYHIXEL son la herramienta complementaria ideal para mejorar de forma más rápida y efectiva. Actualmente, MYHIXEL cuenta con dos modelos diseñados para adaptarse a diferentes necesidades: MYHIXEL I, la versión original, y MYHIXEL II, un modelo avanzado que incorpora mejoras tecnológicas. Son los dispositivos más realistas del mercado, puesto que su interior replica fielmente la textura y sensación de una vagina, con un sistema de calentamiento y vibración incluidos.
También están los tratamientos médicos tradicionales, como los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS), que suelen recetarse para la eyaculación precoz crónica.
Está claro que el objetivo de durar más en la cama no es solo satisfacer un deseo personal, sino también mejorar la calidad de la experiencia sexual para ambos miembros de la pareja. Según la Sociedad Internacional de Medicina Sexual (2018), las parejas que duran más en la cama dicen tener mayor satisfacción en la relación sexual, ya que permite más tiempo para explorar y disfrutar de la intimidad compartida.
Como te decía al principio, una vida sexual saludable y satisfactoria contribuye al bienestar general de la relación. Cuando ambos miembros de la pareja se sienten cómodos y felices en la intimidad, la relación tiende a ser más fuerte y plena. Y es que durar más en la cama no solo es beneficioso para ti, sino también para la conexión que compartes con tu pareja.
En definitiva, no solo es posible aprender a durar más en la cama, sino que la ciencia lo respalda con diversas estrategias que pueden ayudarte a mejorar tu rendimiento sexual. Ganar control sobre tu eyaculación va más allá de la cuestión del tiempo. También mejora tu calidad y cómo te sientes con tu cuerpo y tu mente. No olvides que, si bien la duración es importante, lo más esencial es disfrutar de la experiencia y sentirte satisfecho con tu vida sexual. ¿Estás listo para disfrutar mucho más y aprender a durar lo que realmente quieres?
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Pyke R. E. (2020). Sexual Performance Anxiety. Sexual medicine reviews, 8(2), 183–190. https://doi.org/10.1016/j.sxmr.2019.07.001
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